Las soluciones de irrigación se utilizan típicamente en los siguientes casos:
- Humedecimiento de tejidos y lavado de cavidades corporales durante procedimientos quirúrgicos;
- Limpieza de heridas, quemaduras y estomas;
- Humedecimiento de apósitos y gasas;
- Irrigación ocular;
- Uso en humidificadores y vaporizadores;
- Actualmente, todas las normas sugieren el uso de soluciones de irrigación en monodosis, para evitar contaminaciones cruzadas. Es fundamental utilizar las soluciones de irrigación en presentaciones adecuadas para cada tipo de uso, lo restante siempre debe ser desechado.